Amazon ha anunciado el despido de alrededor de 14,000 empleados corporativos, una medida que forma parte de su estrategia para reducir costos y reorientar recursos hacia el desarrollo de inteligencia artificial (IA). Los recortes, que representan cerca del 4 % de su plantilla corporativa, son los más grandes desde 2023, cuando la compañía eliminó 27,000 puestos.
Beth Galetti, vicepresidenta sénior de Experiencia y Tecnología de Personas en Amazon, confirmó en una carta interna que los empleados afectados recibirán la notificación esta semana. Cada trabajador dispondrá de 90 días para postular a otros puestos dentro de la empresa; aquellos que no logren recolocarse recibirán indemnización, servicios de recolocación y cobertura médica temporal.
En la carta, Galetti aseguró que la decisión busca “simplificar estructuras” y “mejorar la eficiencia operativa”, especialmente en un contexto en el que Amazon está invirtiendo fuertemente en automatización y nuevas tecnologías de IA.
Un cambio de era dentro de Amazon
Desde que Andy Jassy asumió el cargo de director ejecutivo en 2021, ha dejado claro su objetivo de hacer de Amazon una compañía más ágil y rentable. Durante los últimos meses, Jassy ha impulsado una transformación interna marcada por la automatización de procesos y la expansión agresiva en infraestructura de IA y computación en la nube.
Solo en 2025, Amazon ha destinado más de 10,000 millones de dólares a la construcción de centros de datos en estados como Mississippi, Indiana, Ohio y Carolina del Norte, destinados a fortalecer su división Amazon Web Services (AWS) y a competir directamente con gigantes como Microsoft, Google, Meta y OpenAI.
Jassy afirmó que actualmente la empresa desarrolla más de 1,000 aplicaciones y servicios de inteligencia artificial, incluyendo la próxima generación de su asistente virtual Alexa+, y aseguró que “cada experiencia del cliente será reinventada con IA”.
Este enfoque, sin embargo, ha tenido un costo humano. A medida que Amazon acelera su transición hacia un modelo basado en automatización, los puestos tradicionales se vuelven prescindibles, especialmente en áreas administrativas y de soporte corporativo. Analistas del sector describen esta etapa como “un punto de inflexión entre el capital humano y la infraestructura tecnológica”.
Ajustes laborales en medio de un contexto económico incierto
El anuncio de despidos llega en un momento en que el mercado laboral estadounidense muestra signos de desaceleración. Aunque las cifras de desempleo se mantienen estables, la contratación en el sector privado ha disminuido y varias empresas de retail han reducido su personal estacional ante la incertidumbre económica y los efectos de las tarifas comerciales.
Pese a ello, Amazon planea contratar 250,000 trabajadores temporales para la temporada navideña, manteniendo el mismo volumen de empleos estacionales que el año pasado. Esto refleja que, aunque busca optimizar su estructura corporativa, la compañía sigue dependiendo del comercio electrónico como su motor principal.
Neil Saunders, director general de GlobalData, describió los despidos como una “limpieza profunda” dentro de la organización, pero señaló que Amazon “sigue operando desde una posición de fortaleza”. Según Saunders, el gigante del comercio electrónico mantiene buenas tasas de crecimiento y todavía posee “amplio margen para expandirse tanto en Estados Unidos como a nivel internacional”.
Aun así, Amazon no está exenta de riesgos. Los costos crecientes y la presión por mantener rentabilidad mientras invierte miles de millones en IA podrían marcar los próximos trimestres. La empresa publicará sus resultados financieros este jueves, tras reportar un crecimiento del 17.5 % en su división AWS durante el último trimestre.